Historia de Sopó
Después de la fundación de Santa Fe de Bogotá, se llevó a cabo el primer reparto de tierras, y el conquistador Juan Alonso recibió la encomienda de Sopó, Cueca y Meusa. En el siglo XVI se reconocieron las tierras de los indígenas, se midieron sus estancias y se limitaron las propiedades.
En 1653, el pueblo de Sopó fue fundado por Fray Francisco Chacón, quien trasladó a los indios que vivían en los antiguos poblados de Sopó, Cueca y Meusa a este nuevo sitio. En la vereda de Pueblo Viejo, hacia el occidente de la actual población, las autoridades españolas establecieron un resguardo de indígenas conocido como Sopó. Allí se encontraba una pequeña iglesia o capilla a cargo de los dominicos, quienes habían estado doctrinando allí desde 1612.
El nuevo pueblo de Sopó se formó entre 1600 y 1639, y fue habitado por los indios de Meusa, Cueca y Sopó. En ese momento, existían dos pueblos viejos. Como no se llegó a un acuerdo en el primer pueblo viejo, se generó un pleito entre los habitantes de ambos sitios. El comisionado Juan de Padilla intervino en este asunto, a pesar de haberse dispuesto inicialmente que se poblaran en Meusa. El primer pueblo viejo se estableció en los alrededores de la actual hacienda Casablanca, en un sitio conocido hoy como Briceño, sobre el camino a Tunja. Posteriormente, se mudaron al punto denominado Cueca, pero mantuvieron el nombre de Sopó.
Fue fundado el 25 de mayo de 1.653 por Fray Francisco Chacón. Su nombre en lengua chibcha significa «Piedra o Cerro Fuerte».
En carta del 8 de mayo de 1857 el párroco Trinidad Eusebio Barreto informaba al Arzobispo haberse terminado «ayer» la iglesia parroquial.
El 19 de noviembre de 1876 se libró en el puente de Sopó un combate entre las fuerzas gobiernistas al mando del General Alejo Morales y la Guerrilla de Guasca mandada por el General José María Herrán.
Sopó tuvo embarcadero sobre el río Bogotá cuando éste era navegable entre Sesquilé y Soacha.
El reloj de la torre fue donado en 1912 por Marco Fidel Suárez.
El 15 de agosto de 1926 se inauguró la Estación «Eduardo Briceño» del ferrocarril del nordeste.
Del 26 de abril al 3 de diciembre de 1953 bajo la dirección del arquitecto Alfredo Rodríguez se construyó la Capilla del Señor de la Piedra.
El territorio del Valle de Sopó, en tiempos del imperio de la civilización muisca, estuvo conformado políticamente por tres territorios independientes entre sí: Sopó, Cueca y Meusa.
El Cacicazgo de Sopó: extendido sobre la parte occidental del Valle.
Cueca: ocupaba la zona central.
Meusa: Sus territorios estaban ubicados en el área oriental.
En la vereda de Pueblo Viejo, situada hacia el occidente de la actual población, establecieron las autoridades españolas un resguardo de indígenas, conocido desde entonces como Sopó, donde hubo una pequeña iglesia o capilla a cargo de los dominicos, quienes desde 1612 doctrinaban allí.
El nuevo pueblo de Sopó, se fundó entre 1600 y 1639, fue formado por los indios de Meusa, Cueca y Sopó. Existían entonces dos pueblos viejos, como no se amañaron en el primero, se formó pleito entre unos y otros, asunto en el que intervino el comisionado Juan de Padilla, a pesar de haberse dispuesto, en principio, que se poblaran en Meusa. El primer Pueblo Viejo tuvo asiento por los lados de la actual hacienda Casablanca, sitio que hoy se conoce como Briceño, sobre el camino a Tunja. De allí se mudó al punto denominado Cueca, conservando el nombre de Sopó.
DATOS IMPORTANTES:
FUNDACIÓN
25 de mayo de 1.653
APARICIÓN
Nuestro Señor de la Piedra. 1753
IGLESIA
Finalizada el 8 de mayo de 1.857